Insistiendo un poco en el microondas, lo práctico y limpio que es, he comenzado aprovechando sus cualidades para conservar mejor las propiedades de las frutas y verduras para no cocerlas en exceso lo que provoca que el 80% de sus cualidades se van al garete. La causa es simple:
¡demasiado tiempo en la cacerola!. Con el microondas el tiempo se reduce considerablemente.
Así que insisto, insisto e insisto, usar el microondas todo lo posible cuando se trate de vegetales.
Bien, al lío: mermelada o compota en 5 minutos.
Quien conoce la receta de la mermelada sabe que lleva tanto de azúcar como de fruta. Si es medio kilo de fruta se tendrá que poner medio kilo de azúcar. Para evitar tanta glucosa me valgo de la gelatina neutra, lo que me permite espesarla. Así estará tan azucarada como apetezca al paladar pero más suave en calorías.
1.- He comprado higos, los lavé y limpie. Luego los corté a trocitos en una fuente. Lo tapé con papel film e hice unos agujeritos para la ventilación y listo para el microondas.
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En mi caso particular, no le pongo azúcar debido a mi obesidad. Lo que hago es ponerle un chorrito de agua y lo dejo 24 horas en la nevera. Al día siguiente he aprovechado al 100% el almíbar para preparar la mermelada. |
2.- Echar azúcar al gusto, remover bien y ponerlo al microondas. En este caso fue 1 kilo de higos por lo que lo dejé 4 minutos. (A mi me gusta el clavo de olor, pero es una opción nada obligatoria).
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A la izquierda, los higos recién salidos del frigorífico. Ya se nota el caldo almibarado. A la derecha, los higos tras 4 minutos en el microondas y con las hojas de gelatina neutra preparada para mezclar. |
3.- Sacar los higos del microondas y preparar las hojas de gelatina y mezclar todo con los higos aún calientes. Poner dos minutos más en el micro. Para un kilo yo le eché 3 hojas ya que no quiero una gelatina de higos sino una mermelada. Si hiciera compota le hubiera echado 2 hojas solamente.
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Como la mermelada me gusta con trocitos no usé la batidora sino que los machaqué con un tenedor. A la izquierda, la mermelada ya hecha. A la izquierda, guardada en un bote lista para la nevera. |
4.- Aplastar si te gusta ver los trocitos o pasar la batidora si te gusta que forme un puré más fino. Para finalizar le echo un poco de vainilla líquida para dar aroma y sabor. Esto también si te agrada.
¡Y fin de la preparación! Rápido y limpio, ¿verdad?
Este apartado es una práctica que me han enseñado asegurando que la comida queda envasada al vacío sin necesidad de ninguna máquina.
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Dos sistemas: 1) Con un tarro. 2) en una bolsa con cierre |
He cogido un tarro pequeño y lo he hervido con su tapa durante 20 minutos. Tras lo cual, le metí mermelada y lo cerré. Luego hay que darle la vuelta hacia abajo y dejarlo así 24 horas en la misma encimera.
El segundo sistema consiste en una bolsa con cierre para los alimentos, meter la mermelada, ponerla en agua e ir cerrado con el zip. El agua saca el aire de dentro y la deja estanca. Bueno, tengo que decir que no me fío mucho pero ahí queda el experimento a la espera de cuánto tiempo aguantará la comida. Hay que tener en cuenta que en este caso no lleva ninguna azúcar. Ya veremos.
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A la izquierda los dos tarros. El pequeño estará así durante 24 horas. A la derecha otra mermelada de ciruelas pero esta vez pasada con la batidora. |
Saludos.
Modifico porque desde el 28-10-2016 hasta hoy que lo abierto (7-12-2016) la mermelada estaba bien para comer. Pero había una pega: como yo no le había puesto azúcar, la fructosa del higo no cuajó bien y estaba algo agrío para mi gusto. Es decir, que quien lo haga con azúcar le saldrá perfecto.
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Aspecto impecable. |